Detalles:
Descrito por Hans Van Gemert en su libro “Órganos Históricos del Perú”.
Al parecer, la iglesia de Lamay
ha sufrido graves problemas estructurales durante su existencia. En 1747 el
techo de la iglesia se desmoronó y se pagaron entonces 280 pesos a Blas Andia
para que repare el órgano.
Cuando Van Gemert visitó la
iglesia en noviembre de 1983, se encontró con el piso del coro desarmado y el
órgano asentado sobre unas ramas apoyadas en las vigas.
De todas formas, se puede ver que
se trata de un instrumento muy interesante, con algunos detalles que lo elevan
a la categoría de “poco común”: tiene grandes caños en fachada, dispuestos en
tres castillos más dos caras planas.
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